Alcalá de Guadaíra, marzo de 2010.- Un total de 45 beneficiarias y beneficiarios de Atticus pertenecientes a los itinerarios de inserción de camarera de piso, celadora y auxiliar de servicios, este último seguidos por personas con discapacidad psíquica, han participado en una jornada de convivencia en el entorno del Guadaíra y han conocido los aspectos más significativos de la historia alcalareña a través de su río, lo molinos harineros, el Puente Romano o la ermita de San Roque, entre otros.
El equipo de Atticus ha destacado el gran interés y entusiasmo del alumnado por conocer las raíces, cultura y tradiciones de Alcalá. En una jornada en la que respetó el buen tiempo el grupo hizo un recorrido por el entorno del Guadaíra, sus molinos, el Calvario, el Parque Oromana, el Hotel y el Puente Romano.
La visita estuvo guiada por uno de los integrantes del Proyecto Atticus, el trabajador social alcalareño Rafael Piña, quien aprovechó su experiencia en el sector turístico para transmitir a los visitantes los aspectos más singulares de la actividad productora de los molinos y la importancia de Alcalá de Guadaíra como suministradora de productos básicos para Sevilla como el agua y el pan.
Especialmente emotiva fue la demostración realizada a los excursionistas, en el interior de la ermita de San Roque, de los toques de flauta del ritual que lleva a cabo en Semana Santa la Judea de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, y que corrió a cargo de uno de sus integrantes.
El objetivo de este tipo de actividades, según la dirección de Atticus, es el de reforzar la identidad y orgullo de pertenencia al municipio divulgando su rico patrimonio histórico y cultural sobre el terreno, y al mismo tiempo aligerar la gran carga didáctica que estas personas siguen en su proceso de formación para su incorporación con total garantía a un puesto de trabajo.